El uso del chupete además de tener efectos calmantes y reducir la ansiedad del bebé se ha demostrado que reduce la incidencia de la muerte súbita pero cuando llega el momento es necesario parar este hábito ya que podría crear malformaciones en el paladar y los dientes del pequeño.
¿Cuál es la mejor edad para dejar el chupete?
Según los expertos, la edad recomendada para dejar el chupete sería desde los doce meses a los 24, pero también aseguran que esto es algo que varía en función de la madurez del niño o de las circunstancias médicas aunque es cierto que más de los tres años podría ocasionar problemas serios en la dentadura del niño.
¿Cuándo es el mejor momento?
Es muy importante que se tengan en cuenta las fechas, no elegir momentos de la vida del niño que puedan ser estresantes para ellos como, los cambios de domicilio, separaciones, llegada de un hermanito nuevo, etc. Tampoco debemos quitárselo de golpe ni forzar la situación.
Algunos trucos y consejos…
- Nunca castigar ni comparar a tu peque con otros niños que ya han dejado el chupete, tampoco es conveniente caer en el error de decirle frases como “solo los bebés llevan chupete” ya que puede llevarle a situaciones de estrés que aumenten la necesidad por el chupete.
- Horarios de uso; Lo mejor es que deje de utilizar el chupete de manera progresiva por ello cuando el peque se levante, puedes guardar el chupete en una caja o en el cajón de la mesilla de noche y dejarlo ahí hasta la hora de dormir. Si pregunta por él, le explicaremos la razón de por qué se le ha guardado ofreciéndole a cambio un sustituto como por ejemplo, un peluche de tacto suave para que el niño lo abrace y se relaje con el.
- Realizar una tabla de recompensas en la que se vaya recompensando al niño según sus logros.
- Utilizar sustancias amargas no es la mejor forma de que el peque deje el chupete y además podría crearle un trauma.
- Negociar una fecha para dejarlo como por ejemplo su cumpleaños, las próximas vacaciones o el fin de semana.
- Ofrecerle que de su chupete a algún ser querido o que lo deje en la almohada para que el Ratoncito Pérez le deje un regalo.
- Nunca volver atrás, es muy importante que una vez se haya dado el paso, aunque el peque llore o tenga rabietas no se le vuelva a ofrecer el chupete, debemos ser firmes en esto porque sino todos los esfuerzos que hemos puesto en un principio no servirán de nada.
Para esta etapa, el niño va a necesitar muchos mimos y cariño ya que es un proceso difícil para ellos, puede que se enfaden y les cueste conciliar el sueño por ello debemos tener paciencia y darle todo nuestro apoyo.