Una Doula es una guía en el parto y en postparto. Son en su mayoría madres, que acompañan a otras mujeres en el camino de la maternidad. Su labor fundamental es dar apoyo, tanto físico como emocional, durante el embarazo, el parto y el puerperio.
La figura de la doula es fundamental en esta etapa de la mujer ya que es una profesional que cubre la necesidad emocional actual de las madres.
La madre debe tener el protagonismo que se merece, y recibir los cuidados de sus familiares y allegados ya que acaba de traer una nueva vida al mundo y necesita apoyo en todos los ámbitos, tanto física como emocionalmente.
Muchas madres después de parir se sienten solas ya que el padre debe volver pronto al trabajo y no disfruta de un permiso paterno para acompañar y disfrutar juntos (como debería) del nuevo integrante de la familia y echar una mano a la madre en muchos sentidos.
Por ello, para cuando esta situación pasa, es muy beneficioso para la madre estar acompañada por una Doula. Si bien es cierto que las Doulas no tienen aún una formación académica regulada pero sí que cuentan con formación específica que abarca tanto conocimientos básicos sobre fisiología del embarazo, parto y puerperio como de puericultura, lactancia, educación prenatal.
Las doulas han ido naciendo junto con otros grupos de apoyo (grupos de lactancia,entre otros), para retomar el apoyo entre mujeres, para recuperar la realidad de la maternidad como crisis vital en la vida de una mujer y recuperar el espacio y posición que les corresponde.
Una doula acompaña y apoya a la mujer que contrata sus servicios. Confía en ella y en su bebé, la respeta y la cuida. En caso de tener que ofrecer información sobre algún tema, la doula siempre debe hacerlo sin dar su opinión, sin recomendar, ni llevar a su terreno y sin juzgar ninguna decisión. La mujer decide de manera libre o en compañía de su pareja.
Las doulas no hacen servicios sanitarios, ni clínicos. Pero sí que pueden poner una bolsa de agua caliente en la zona lumbar, para ayudar a calmar el dolor, por ejemplo.
No se deben cerrar los ojos a los sentimientos que invaden a la mitad de población, varias veces en ocasiones, y que repercuten en la formación de la sociedad del futuro.
Si queréis hacer un regalo realmente especial cuando vayáis a ver a un recién nacido, no olvides llevarle a la madre un par de tuppers de comida o regalarle unas horas de limpieza, y así, de esta manera ella pueda descansar y disfrutar de su bebé plenamente. ¡Se sentirá mimada y muy querida!